Los hermanos Madariaga, principales sospechosos por el crimen de Morena Domínguez, habían sido beneficiados por la Justicia en un juicio por otros delitos y sobre ambos recaía un pedido de captura.
Miguel Ángel y Darío Humberto Madariaga habían sido condenados a tres años por el Tribunal Oral Criminal (TOC) N°30 por el robo de vehículo en la vía pública. En ese mismo veredicto, fueron condenados Jorge Amado y Abraham Quinteros.
En aquella oportunidad, Darío Humberto (28) había recibido una pena de tres años, mientras que Miguel Ángel (25) recibió una condena de cuatro años y seis meses de prisión porque arrastraba un antecedente de una pena en suspenso del Tribunal Oral Criminal (TOC) N°25.
La condena de ambos hermanos fue homologada por el Tribunal, ya que los hermanos habían hecho un pacto con la fiscalía para tener un juicio abreviado de tres años con prisión efectiva. Sin embargo, cada uno tuvo un particular beneficio por parte de la Justicia.
El mayor de los Madariaga fue beneficiado por el alivio de la acusación de la Cámara Nacional de Casación Penal. Los jueces entendieron que el robo en poblado y en banda no había existido y lo caratularon como robo simple.
El expediente fue enviado al TOC N°30 para que se le imponga una nueva pena, pero cuando le notificaron al imputado que la causa iba a avanzar, Darío Humberto -quien ya gozaba de libertad condicional- nunca se presentó y fue declarado como rebelde. Es por eso que tenía pedido de captura.
La situación judicial de Miguel Madariaga también tuvo un beneficio. Es que en un principio le habían impuesto una pena de tres años con prisión efectiva, al igual que a su hermano, pero al tener antecedentes de una pena en suspenso impuesta por el Tribunal N°25, la condena unificada fue de cuatro años y seis meses.
Sin embargo, durante el proceso judicial se detectó que había un antecedente del juzgado correccional de Lomas de Zamora que no había sido tenido en cuenta. Ante esa situación, la defensa y la fiscalía volvieron a pactar y pidieron ante el Tribunal mantener la condena cuatro años y seis meses.
Al igual que ocurrió con su hermano mayor, cuando le quisieron notificar a Miguel Madariaga sobre los cambios en su situación procesal, el imputado -que también gozaba de libertad condicional- nunca se presentó y fue declarado rebelde con el pedido de captura correspondiente.
Los hermanos Madariaga, en medio de ese proceso judicial, ya habían alcanzado la libertad condicional y por eso estaban en libertad. No obstante, sobre los dos pesaba un pedido de captura del Tribunal N°30 porque nunca se presentaron a derecho para ser notificados de las condenas respectivas.