Boca Juniors perdió este sábado la final de la Copa Libertadores frente a Fluminense y el resultado adverso terminó en tragedia para una familia de la localidad bonaerense de Claypole, ya que un joven policía de 23 años se quitó la vida y su madre aseguró que fue por lo sucedido en el Maracaná.
Marcelo Morales, un policía que se encontraba en licencia médica, vio el partido con su hermano y su papá, y fue su mamá, Verónica, quien lo encontró muerto en su cama este domingo.
En diálogo con Crónica TV, la madre del joven fanático del Xeneize relató que “era un fanático, era re fanático de Boca, si perdía se ponía mal, estaba deprimido, se ponía mal, triste, se pegaba piñas”.
Por otra parte, contó que “no pensé que mi hijo iba a llegar a ese límite de matarse”, y reveló que “hace unas semanas le había dicho al papá ‘si Boca no gana el 4 de noviembre yo me mato’. Pensamos que estaba haciendo un chiste”.
Finalmente, conmovida por el dolor, Verónica apuntó contra el club: “Boca es una basura, porque me mataron a mi hijo, por ellos se mató”.
“Yo ahora no lo tengo y no hay ningún jugador que haya venido a mí a darme el pésame”, lamentó mientras mostraba la última camiseta del Xeneize que se compró Marcelo.