A principios de febrero, un trágico accidente le quitó la vida a Ana Choque Estrada, de 34 años, cuando una enfermera que conducía ebria y a toda velocidad impactó contra la mujer en San Carlos. Tras darse a la fuga, fue detenida a más de dos kilómetros. Pese a estar imputada, la conductora recuperó la libertad.
Paola Gallardo, quien manejaba un automóvil Renault Sandero aquel fatídico día, fue imputada por homicidio agravado por conducir alcoholizada y por darse a la fuga. La decisión de liberarla se dio según ciertas condiciones: La mujer de 38 años no tiene antecedentes penales y esa calificación legal, que prevé de 3 a 6 años de prisión, permite una condena excarcelable en un futuro.
La medida causó la indignación de familiares y amigos de la víctima fatal, quienes realizaron movilizaciones hacia la Municipalidad de San Carlos exigiendo Justicia. Además, explicaron que no tienen el dinero suficiente para pagarle a un abogado que pueda patrocinarlos en el expediente.
Cómo ocurrió el accidente
En la madrugada del 2 de febrero, Estrada con su esposo y su bebé de 2 años se dirigían caminando por el costado de la calle Ejército de los Andes, desde su casa en La Consulta a sacar un turno al médico al hospital Tagarelli.
Sin embargo, en un momento, un auto se acercó a gran velocidad e impactó violentamente a la mujer, quien murió a los pocos minutos. Gallardo huyó de la escena, pero fue detenida en la misma arteria a casi dos kilómetros y medio de distancia del lugar.
La conductora de la Renault Sandero manejaba ebria y, cuando se le realizó el test, resultó que tenía 1,43 gramos de alcohol en sangre, casi el triple del máximo que permite la Ley de Tránsito.
Según la investigación, fue tan brutal el impacto que arrojó a Estrada a un canal ubicado en el costado sur de la calzada. Su esposo y su hijo se salvaron por cuestión de centímetros.
Fuente: Diario Mendoza