El discurso mileísta de “no hay plata” le llegó hasta a la Fiesta de la Vendimia. Este año por primera vez, el gobernador Alfredo Cornejo y el equipo de Cultura decidieron eliminar los históricos palcos de autoridades de Vía Blanca y Carrusel. Esas estructuras en las que funcionarios, invitados y sus parejas podían ver los actos vendimiales desde un lugar privilegiado, disfrutando de tentadores catering, este año no estarán.

“Es una decisión de austeridad. Hemos calculado que entre el montaje de las estructuras de 8 palcos que son los que se montaban en calle San Martín y frente al hotel Hyatt, más la comida con la que se asistía a los invitados nos vamos a ahorrar más de $30 millones”, justificaron desde Casa de Gobierno.

Los organizadores de la Fiesta de la Vendimia tienen claro que con ese cambio están derribando también una histórica costumbre y eliminando esa postal vendimial que muestra a un funcionario recibiendo un regalo frutal de una reina vendimial, pero creen que ese recorte no impactará en el normal desarrollo de los dos actos previos a la fiesta en el anfiteatro Frank Romero Day.

“Entendemos que no va a alterar el curso de ambos actos, porque para la Vía Blanca quienes vengan lo podrán ver desde la calle como cualquier mortal y para el Carrusel, los invitados suelen ir antes al desayuno de Coviar que se hace en el mismo Hyatt y si quieren presenciarlo lo podrán hacer desde las terrazas del hotel y luego llegar con tiempo al tradicional almuerzo de Bodegas de Argentina”, confiaron.

Es real que el montaje y la cobertura de esos palcos involucran un costo importante para ambos actos vendimiales, pero también es cierto que con esta eliminación de esa exposición de autoridades el Gobierno también esquiva posibles manifestaciones que ya están organizando algunos productores vendimiales.

Los productores viñateros de la zona Norte y Este, con el respaldo de la Federación Agraria de Mendoza, ya están armando una protesta que calificaron de “velorio de la Vendimia” en reclamo por el precio de la uva por la que están recibiendo menos de la mitad de lo que necesitan.

A la par, pretenden que eliminando esos palcos, frente a los cuales se detienen los carros vendimiales y hasta las federaciones gauchescas para agasajar a los funcionarios, también se pueda acelerar el pasaje de reinas y esas otras organizaciones y se dimanicen esos eternos desfiles.

Pero al parecer ese no será el único recorte que tenga esta Fiesta de la Vendimia: la Semana Federal -que es parte del cronograma Vendimia- se transformará en un fin de semana; y se unificarán eventos que antes estaban separados para ahorrar en logística y personal.

No vendría Milei pero podría llegar su vice

Si bien aún resta que muchos de los funcionarios nacionales invitados confirmen su presencia a la Fiesta de la Vendimia, los organizadores ya descartan que llegue el presidente Javier Milei.

Mucho más ahora, que el presidente salió a sugerirle a los gobernadores que patalean por más fondos nacionales que echen mano a los festivales para reemplazar esos fondos que él ya decidió recortarles como es el caso de los subsidios al transporte y los fondos para incentivo docente.

Sin embargo, en el área de Protocolo se esperanzan con que sí pueda llegar la vicepresidenta Victoria Villarruel que habría dado señales de estar interesada en participar de los actos vendimiales.

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