La mañana de este lunes la aerostación Francisco Gabrielli en la provincia de Mendoza se desayunó con la presencia de una aeronave vestida con el nombre de una figura internacional. El que aterrizó en pistas mendocinas se trató de el Gulfstream V de Lionel Messi.
El avión que en diciembre del año pasado fue adquirido por el número 10 del F.C. Barcelona bajo la matrícula argentina LV-IRQ, está valuado en 15 millones de dólares.
Esta aeronave ejecutiva tiene una capacidad para 16 pasajeros, cuyos asientos se pueden transformar en una cómoda cama, también cuenta con dos sanitarios, uno de ellos con una regadera, además de dos cocinas; el toque característico de este aeroplano radica en el número 10 que porta el jugador bajo los colores del Barcelona en el estabilizador horizontal de la aeronave, además de mandar a inscribir los nombres de su mujer Antonela, y sus hijos Thiago, Ciro y Mateo en la escalinata eléctrica de la aeronave.
El Gulfstream V tiene un alcance de más de 10,000 kilómetros, y puede alcanzar velocidades de crucero de hasta 940 kilómetros por hora, siendo una de las aeronaves ejecutivas con mayor alcance y velocidad.
Fuentes cercanas al aeropuerto internacional confirmaron que la aeronave fue alquilada por un excéntrico millonario – el valor del alquiler ronda los 6 mil euros la hora – quien tenía las intenciones de conocer algunos puntos turísticos de la provincia.
El que tiene plata, hace lo que quiere, reza el dicho y así pareció ser el caso de este magnate, que “usó” el avión del astro internacional y tuvo a varios curiosos mendocinos expectantes respecto a quién se encontraba en el interior. No era el “10” ni ninguno de su entorno, pero muchos se ilusionaron…