El caso de Manuela Medina fue conocido a nivel nacional. La mujer de 31 años, era policía y asesinó a su hijo de 5 años a balazos. Luego, se disparó en el abdomen para quitarse la vida y falló. Estuvo un mes internada en un hospital de Barrio Norte y murió este jueves por la tarde.

El hecho ocurrió el 1 de noviembre y desde ese día que la mujer recibía cuidados intensivos en el centro asistencial ubicado en Barrio Norte. Sin embargo, alrededor de las 20 del jueves, falleció. La información fue confirmada por María Marta Vargas, subdirectora del Centro de Salud.

Medina prestaba servicios en la Dirección de Patrulla Urbana, estaba con licencia psiquiátrica y se había reincorporado a su trabajo unos días antes del crimen, después de recibir el alta médica.

EL ASESINATO

El hecho ocurrió el 1 de noviembre en la ciudad de Los Ralos, en Tucumán. Medina había recibido el día anterior el alta médica, después de haber realizado un tratamiento psiquiátrico.

La mujer de 31 años, había recuperado su arma reglamentaria el día anterior a cometer el filicidio, ya que había recibido el alta por una licencia psiquiátrica que le habían otorgado.

Alrededor de las 18 horas, llamó a la policía pidiendo ayuda. Dijo que su hijo estaba muerto y que lo habían “herido muchas veces” y que ella necesitaba ayuda porque estaba lastimada.

Cuando un agente policial llegó a la propiedad, encontró la puerta cerrada y la voz de una mujer que hablaba pero no se le entendía. Cuando pudo ingresar, descubrió el horror.

Los peritos recolectaron cinco vainas servidas, compatibles con los disparos que tenían Medina y Yulián. Los investigadores habrían descartado la participación de terceras personas en la escena del crimen, por eso la hipótesis central se encamina a que fue la mujer la que produjo el ataque.

Compartir

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *