No tenía nada que perder y “lo hizo porque no podía ver a su hija”. Pasa sus días aislado en el pabellón 5.4 de máxima seguridad de Almafuerte desde el 2015, purgando la pena de prisión perpetua.
Entre sus compañeros de sector se encuentra Cristian Oscar Tapia, el Pirincho, el malviviente que estaba internado en el Hospital Perrupato en febrero del 2015 y fue “rescatado” durante un golpe comando, que le costó la vida a un policía que se encontraba de consigna.
Hugo Eduardo Arredondo Suárez es un preso considerado peligroso. Tiene 34 años y lo apodan Mecha. “No está bien psicológicamente hace años. Está loco y es muy agresivo”, describió un interno de la penitenciaría, en charla con este diario, luego de perpetrado el grave hecho que protagonizó al intentar matar a la fiscal de Homicidios Claudia Alejandra Ríos durante una audiencia de debate oral en el edificio de Polo Judicial.
Tras el ataque contra la representante del Ministerio Público y una estudiante de Derecho que presenciaba el proceso oral en la sala 15 del complejo ubicado hacia el oeste de la prisión de Boulogne Sur Mer, en Ciudad, el Mecha Arredondo habló con algunas autoridades judiciales y penitenciarias.
“Lo hice porque no puedo ver a mi hija hace cuatro meses. Era la única forma de llamar la atención”, comentó brevemente ante los presentes. Algunos le creyeron. Otros no y sostienen que podrían estar ante un plan organizado de intento de fuga al estar acorralado por saber que no volverá a salir de prisión. “Podría haber sido su oportunidad para escapar”, detallaron fuentes policiales.
De acuerdo con fuentes penitenciarias que hablaron con este diario, Arredondo tiene permitidas las visitas de sus familiares en el penal de Cacheuta. El problema radica en que la madre de la pequeña no la lleva hasta el penal por causas personales y prefiere evitar todo tipo de contacto con el padre.
Al parecer, los problemas de conducta del interno serían uno de los motivos de su aislamiento carcelario y familiar. Justamente, sobre su comportamiento, las autoridades vienen ordenando que se pase sus días aislado, casi sin contacto con otros internos.
Tiene antecedentes de agresividad en el pabellón y fue condenado a 14 años de cárcel por matar a un interno con quien mantenía problemas. Previamente, había recibido perpetua por acribillar a balazos a un militar retirado para robarle su camioneta Toyota Hilux.
Lo cierto es que, mientras el Servicio Penitenciario quedó en la mira –siete guardias fueron pasados a disponibilidad– el caso quedó en manos de la fiscal de Homicidios Andrea Lazo.
Luego del hecho se tomaron testimoniales en la causa (declararon la propia fiscal, la estudiante de Derecho y hasta la defensora oficial del Mecha, Ximena Morales) y es posible que este jueves (no se descarta el viernes) se conozcan las imputaciones.
La calificación que analiza Lazo contra Arredondo es intento de homicidio, entre otras. Además, la conducta de otro de los reos que estaba siendo juzgado en el mismo debate, también quedó bajo análisis. Por eso, no se descarta que haya más de un imputado.
